Tudor 7924, nuevo récord de referencia de valor en subasta

Para los que disfrutamos y apreciamos la relojería mecánica es una buena noticia leer de su buena salud a través de las publicaciones de subastas referentes.

Sin ir más lejos, en Octubre de este año 2018, conocíamos el récord obtenido por un Tudor 7924 Big Crown en subasta. Este reloj se ha vendido en 162.500,00 $. Con cantidades de esta magnitud Tudor podría ir olvidándose de ser considerada la marca denominada “Rolex de pobres…”

Tudor, que es filial de Rolex desarrolló este modelo amparado bajo el paraguas del éxito de su “hermano mayor”, el Rolex Submariner, que hiciera popular y mundialmente conocido Sean Connery al lucirlo en la película “James Bond contra el Dr. No” de 1974. De hecho gran parte del éxito y ávida búsqueda de los coleccionistas por estos modelos Vintage de Tudor responden a un hecho innegable. En aquel entonces Tudor montaba cajas Oyster, brazaletes Rolex y muchas fornituras de la marca de la corona. Y hasta tal punto que eran exactamente las mismas piezas de Rolex, con la corona estampada y las letras de la marca madre. Por ello Tudor está ahora de forma muy acertada reviviendo la herencia de estos modelos tan populares entonces, llegando a desarrollar por ello la gama Black Bay, que serían los hijos o nietos de los Submariner de Tudor. Y el gran acierto entendemos nosotros que es mantener la identidad del diseño icónico aunque con las mejoras y evoluciones técnicas/mecánicas actuales.  Como ejemplo sirva comentar que el cristal de los nuevos Black Bay es abombado y tiene el diseño e imagen cálida de plexi, aunque con la dureza del cristal de zafiro.

Otro ejemplo es el brazalete, que ha sido diseñado nuevamente en 2017 para ser comercializado ya en los Black Bay de 2018 y muestra los eslabones “blindados” tal como el original los lucía, aunque estos nuevos son macizos. El cierre con pasador de seguridad y ajuste es de una calidad innegable. Se ha mantenido además el rasgo distintivo e identificable del triángulo rojo a las 12 en el bisel.

Los nuevos Black Bay, desde 2017 montan ya maquinaria propia manufactura, relegando los anteriores que montaban mecanismos ETA. Estos de hecho están siendo ahora más revalorizados, y se pueden encontrar con facilidad a precios que igualan a los de los PVP de los manufactura.

Cierta ironía supone revisar la historia de los modelos “7924” de Tudor vintages (valga decir que no en esta idéntica configuración), pues se podían encontrar antes de esta nueva valoración en cifras que no llegaban a superar los 40.000 dólares. Veremos que deparará el futuro a esta gran marca, cada vez más grande si cabe.

 

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